20 de marzo de 2014

La fuerza de la costumbre



Groucho Marx opinaba que lo bueno tarda en llegar, y con una demora que no ha hecho si no agigantar el deseo y la expectación,  se ha puesto a la venta un documental que recopila la vida y obra del inconfundible Jaime Urrutia, artífice de un grupo musical, Gabinete Caligari, que representaba uno de los lados más interesantes del nuevo panorama artístico nacional desde finales de los setenta, colaborando a reventar los rictus de una españa anestesiada por años de calambrazos moralistas, patrioterotas y un poco cursis en la cosa melódica. Igual en lo demás. "La fuerza de la costumbre" uno de los temas en los que su talento compositivo se da la mano con sus personalísimas reivindicaciones, da título al documento. Aprovecharé esta ocasión para, desde mi particular rol de fanboy y con el objetivo divulgativo poco ortodoxo y algo melancólico, dedicar unas líneas a tan singular persona y a su obra.
 
Jaime Urrutia, pertenece a esa particular especie de artistas que comenzaron a ensayar por el deleite y el gusto de hacerlo, y que con el tiempo, materializándose cierta popularidad se veían empujados a una aventura tan atractiva como desconocida e inesperada. Así, cantar o tocar la guitarra se va apuntalando con la misma improvisada fruición con que su mundo musical crece. El éxito no se puede planificar. Tampoco es necesario el parvulario para empeñados y supuestos talentos. ¿Tiene valor de verdad, cantar con gran voz temas que no han compuesto ellos? La Voz no es lo importante, señores del jurado. Jamás lo comprenderán quienes son simples intérpretes, excepto Sinatra. https://www.youtube.com/watch?v=vPcnWnC8lz0

Los grupos en los que Jaime participa en aquella primera época, Rigor Mortis, Ejecutivos Agresivos, y los primeros años de Gabinete,  permanecían influidos por el corolario new wave, fruto de la antiesencia punk y que protagonizaban personajes retorcidos y atormentados, lúcidos alucinados que sumada la explosiva tralla de drogas y espirituosas,recuerdan a algunos de los personajes de Poe -o a él mismo- y que harían vibrar las bases de lo establecido, ya no desde el limitado incorformismo sino desde el placer de hacerlo todo arder con una canción de fondo, y ni siquiera mirar. Nerón debió haber nacido obrero en la Inglaterra de Tatcher. https://www.youtube.com/watch?v=lIQb6e-3Jhs



Salvo la etiqueta y el acto de componer, Jaime Urrutia se observa como un dandy dentro del mundo cantautor, un concepto que ha pasado de la reivindicación política, presumible o descaradamente de izquierdas, a todo un catalogo repleto de niños y niñas Pop, de todos los colores y sabores desnatados. En el fondo todo sabe a lo mismo, y suena igual. https://www.youtube.com/watch?v=lElG9ncnp8I




Dogmatismo temático, circunscrito en la mayoría de los casos a las relaciones afectivas desde una infantil subjetividad con más de naif que de auténtica cultura popular. Quizá, siendo sus productos, los resultados de elaboradísimas y tediosas investigaciones de mercado, el tirón de orejas, colleja o guantazo en la boca habría que dárselo al público al que se dirige, que es legión. Lección de romanticismo noir:  https://www.youtube.com/watch?v=2V3bAoVE1uY


En el forzado e inesperado regreso de los ochenta, se dejaron olvidados a Gabinete en el canalillo sudado y feo del favoritismo. Jaime no inspira ninguna falsa simpatía. Hace su música. Haced la prueba, si preguntas por él a un hipster, te dirá que el de Martes y Trece. Lo de los chanantes ni les suena. En 2007, se grabó un directo del madrileño. Un séquito de nuevos y viejos vocales le acompañaban cantando y refrescando junto a él,  muchos de sus temas más significativos. Ariel Rot, Eva Amaral, Ivan Ferreiro, Leiva, Bunbury, Loquillo o un Calamaro en diferido, entre otros, participaron en una tarde que comenzó sorprendiendo a todos los modernos con un pasodoble bello y eterno que podría ser el himno de España. https://www.youtube.com/watch?v=gN3oFNhhwT8
 
El universo de Jaime Urrutia es ecléctico y muy intenso. Se reiteran sus gustos, y sus obsesiones, como un Woody Allen sin clarinete. Voz profunda, grave, se regenera y templa con cada nuevo disco, cuyas canciones son trajes a medida en que cada signo solo puede vestir su canto, su tono, su concretísma dicción y la característica acentuación del rockero, que como el buen torero adorna poco de postín y se deja llevar más por su profundo sentir ajustando melodías a un género ya propio. Hoy lo suyo es mimetizar un personaje habitualmente vacío y hacérselo tragar al respetable. Jaime carece de vacío. Su universo interior es el de un apasionado forofo de la música y de la vida. https://www.youtube.com/watch?v=xWrskolDc9U

Su libertad temática y capacidad para convertir lo prosaico en  descomunal epinicio le permite concebir el monumento construido a Belmonte con cada una de sus palabras, el enaltecimiento  del bar como casi de un estado del ser se tratase, abandonarse a lo melodioso de lo trágico, a la ternura materna, a la lascivia, a honrar el cha cha cha, al fetichismo, y según Loquillo, a la lujuria más desenfrenada. En alguna ocasión he oído por ahí que en Soría querían cambiarle el nombre a la renominación Ribera del  Duero por la de Ribera de Urrutia A todo esto, el lenguaje y simbolismo que acompaña a cualquiera de esos mundos, en uno solo. No conocemos Soria, pero pensamos en Japón. https://www.youtube.com/watch?v=6dhcCmMFZPU


Si hace veinte años, ni Dios sabía quién era Juan Belmonte o lo que suponía su figura, en 2014 la cosa no ha progresado adecuadamente en cultura general, añadido además el principio del fin del mundo taurino, es casi imposible sonsacar el dato. Es como McQueen, no solo está muerto, si no que además un director le birla el nombre. Incluso siendo así, merece la pena escuchar de vez en cuando algo como esto. https://www.youtube.com/watch?v=C5QLgiVO0iE


El panorama musical patrio, no es alentador desde el punto de vista comercial, y hay que moverse como se empezó haciendo. La radiofórmula no tiene alma. Es una máquina de hacer dinero a lo bestia, y no hay demasiado lugar para todos los talentos, el don de los hondos himnos que salen del interior de su lado oscuro al artesano creador. Aunque sean los mejores. Será un asunto de marketing al fin y al cabo. Estupenda herramienta de masas que suele arrastrarlo todo por los mismos conductos por los que evacúa el Cardenal Rouco, por ejemplo. Sí, todo se va al mar, menos la barca de Remedios Amaya que a la deriva me lleva. ¿Dónde está ese lugar?  https://www.youtube.com/watch?v=6lCUD_yVuU0

Del documental echo de menos alguna voz discordante, alguien que diga así en plan general que este tío es un pedazo de cabrón. ¿Los amigos se muerden la lengua? O sencillamente Jaime es Jaime Urrutia. De Roy Orbison tampoco se podía hablar mal, ni de Elvis. De Dylan se sigue haciendo. Quizá alguien se ha quedado con las ganas. A su director, solo le falta echarse a la Puerta del Sol con cámara en mano y preguntar al tuerto de la lotería, al rumano que te chora la cartera, o a los polis mastodontes que por ahí se apostan. ¿Esto le ha llevado tanto tiempo? La imagen de Urrutia compuesto por la opinión de los demás del gremio, es un ejercicio de vaguería monumental, aunque admirable en el fondo. En realidad lo mejor y más interesante del tema es hacer un recorrido por su excelente trayectoria musical, conjugable en  todos los tiempos verbales. https://www.youtube.com/watch?v=uMbJVq68ZOY


Bienvenido un merecido documental, necesario reconocimiento a uno de los protagonistas del sector más auténtico de aquella mugrienta y creativa Movida, tan local y cósmica como cierto hidalgo manchego de nuestra literatura. Bravo por el equipo de Cameo, desde suis inicios siempre al tanto de las inquietudes más esenciales y  outsiders. Aunque siempre es buena ocasión para dignificar la estantería del DVD, el documental no hace falta recomendarlo, por que entre otras cosas, de lo que hablo está en su discos.   https://www.youtube.com/watch?v=Z4PYo3QHn0w

No hay comentarios:

Publicar un comentario